REVISTA
JUVENTUD Y CIENCIA SOLIDARIA:
En el camino de la investigación
Consecuencias de la interrupción del
proceso educativo en el tercer año de
bachillerato general unificado de la
Unidad Educativa Parti cular Sagrados
Corazones en Cuenca-Ecuador,
durante la pandemia por COVID-19
Emily Domenica Granada Avecillas
Emily Domenica Granada Aveci-
llas
, tengo 18 años de edad y curso el
tercero de Bachillerato en la Unidad Edu-
cativa Particular Sagrados Corazones. Una
vez concluida mi formación académica de
bachiller planeo estudiar Derecho, con miras
a especializarme en el plano internacional.
Disfruto de leer y escribir.
Resumen
Una de las consecuencias de la emergencia sanitaria
por covid-19 ha sido la interrupción de las clases
presenciales a todo nivel, es por ello por lo que el
presente artículo pretende analizar los efectos que ha
tenido el cambio de modalidad a las clases virtuales en
los estudiantes del tercer año de Bachillerato General
Unificado de la Unidad Educativa Particular Sagrados
Corazones en Cuenca.
Se aborda desde una metodología cualitativa, uti-
lizando la técnica de grupo focal para obtener las
opiniones vertidas por los participantes. Los comenta-
rios emitidos dan cuenta de las percepciones sobre el
impacto que tuvo la modalidad de educación virtual,
la interrupción de la interacción social, la preparación
docente, el uso de tecnologías, en el desarrollo efectivo
de su aprendizaje en el último año de su formación
como bachilleres y, finalmente, recoge las recomenda-
59
60 Juventud y Ciencia Solidaria.
ciones para mejorar la calidad educativa, basados en
la experiencia de los estudiantes.
Palabras clave:
alumnos, docentes, interrupción,
modalidad presencial, modalidad virtual, proceso edu-
cativo
Explicación del tema
A partir de marzo de 2020, Ecuador se sumaba a la
lista de países afectados por una nueva enfermedad
infecciosa causada por una extensa familia de corona-
virus, el covid-19, que impactó al mundo desde un
brote alarmante en Wuhan, China en diciembre de
2019 y, actualmente, es una pandemia que ha azotado
a la población mundial.
Con este antecedente, el 12 de marzo de 2020 los
Ministerios de Gobierno y Educación del Ecuador anun-
ciaron la suspensión de clases presenciales en todos los
niveles del país; inicialmente como medida preventiva
para precautelar la salud de todos los actores educa-
tivos. El 8 de abril el Ministerio de Educación confirmó
que el ciclo escolar concluiría de manera no presencial,
confinando así a docentes y estudiantes en sus hoga-
res, obligando al sistema educativo a incursionar en la
modalidad virtual para impartir clases.
La interrupción de las clases presenciales puede
considerarse como la suspensión del aprendizaje por
mismo, pues la interacción social y el intercambio per-
manente de opiniones son herramientas primordiales
que garantizan la práctica y adquisición de conocimien-
tos. Es evidente que el aprendizaje es una actividad
social y contextual, que está asociada a la conexión
con otros seres humanos, pues los hechos y las teorías
no se aprenden de manera aislada [1].
En este sentido, las relaciones interpersonales forta-
lecen el proceso enseñanza-aprendizaje mediante el
intercambio de opiniones, ideas y sana competencia
entre compañeros y contribuye en gran medida a la
asimilación oportuna de contenidos, porque la inte-
racción social y la comunicación con otras personas
generan experiencias de aprendizaje y el lenguaje es
una herramienta para producir significados [1].
En las condiciones actuales de aislamiento los es-
tudiantes carecen de este recurso comunicacional, que
puede afectar el aprendizaje efectivo y que representa
un limitante en el aprovechamiento de la modalidad
virtual de enseñanza.
Para determinar la percepción de los estudiantes
del tercer año de Bachillerato General Unificado de
la Unidad Educativa Particular Sagrados Corazones
en Cuenca sobre este tema, se conformó un grupo
focal con diez estudiantes, para conocer su opinión.
Para ello se formularon cinco preguntas, utilizando la
escala de Likert donde cada participante pudo emi-
tir su criterio respecto a estar de acuerdo o no con
los planteamientos realizados, según se muestra en
la Tabla 1. Finalmente, la pregunta en relación con
las recomendaciones que los miembros del grupo focal
proporcionaron, fue analizada de manera cualitativa.
Tabla 1. Opinión de participantes del grupo focal
Pregunta 1(Totalmente 2(En desacuerdo) 3(Ni en acuerdo 4(De acuerdo) 5(Totalmente
en desacuerdo) ni en desacuerdo) de acuerdo)
¿Cree que el cambio de modalidad de educación
presencial a virtual interrumpió 0 0 1 2 7
su proceso de aprendizaje?
¿Cree que las calificaciones y evaluaciones
obtenidas representan la adquisición 0 10 0 0 0
fiable de nuevos conocimientos?
¿Las actividades académicas realizadas
durante este periodo fueron significativas 1 8 1 0
para su aprendizaje?
¿El personal docente se adaptó a los
requerimientos tecnológicos de los estudiantes 1 8 1 0 0
o utilizaron las herramientas tecnológicas de
acuerdo a las demandas de los estudiantes?
¿Considera que la falta de interacción social
con docentes, autoridades y estudiantes 0 0 0 1 9
influyó en su aprendizaje?
Fuente: Autora.
En el camino de la investigación 61
A continuación, se muestran los resultados.
Con respecto a la pregunta ¿Cree que el cambio
de modalidad de educación presencial a virtual inte-
rrumpió su proceso de aprendizaje?, que se aprecia en
la Figura 1.
Figura 1.
Pregunta 1: Cree que el cambio de modalidad
de educación presencial a virtual interrumpió su proceso
de aprendizaje
Fuente: Elaboración propia.
En la figura 1, se muestra que los participantes en
su mayoría están totalmente de acuerdo, que se ha
interrumpido su proceso de aprendizaje debido a una
ruptura abrupta de su rutina, un cambio de ritmo en
la forma de enseñar y adquirir conocimiento. Además,
la modalidad virtual facilita la inasistencia a clases ya
que los estudiantes están inmersos en un sinnúmero
de distracciones lo que genera un retroceso en varias
asignaturas y, además, han experimentado estados de
depresión y ansiedad. Una persona opina que la edu-
cación virtual no es negativa, pero depende de las prefe-
rencias personales de los alumnos y la manera en que
sepan distribuir su tiempo.
Las opiniones revelan que, ante la falta de los fac-
tores de interacción mencionados anteriormente, se
está perdiendo el interés en el proceso educativo por
varias razones, una de ellas vinculada a las dificultades
en la comprensión de los contenidos de las asignaturas,
por lo que no están en la capacidad de terminar sus
clases [2]. Así mismo, las distracciones constantes a las
que están expuestos en sus hogares y, en muchos casos,
la ausencia de un mecanismo de interacción reafirma
la sensación de aislamiento y confinamiento, dado que,
para muchos estudiantes, mantener la atención en los
medios digitales para realizar sus actividades académi-
cas de manera organizada, es una tarea muy difícil.
Las condiciones neuropsicológicas, familiares, am-
bientales y la falta de recursos tecnológicos generan
dificultades en el proceso de aprendizaje [3].
En la pregunta ¿Cree que las calificaciones y evalua-
ciones obtenidas representan la adquisición fiable de
nuevos conocimientos?, ver la Figura 2.
Figura 2.
Pregunta 2: ¿Cree que las calificaciones y evalua-
ciones obtenidas representan la adquisición fiable de nuevos
conocimientos?
Fuente: Elaboración propia.
Según la figura 2, los participantes de forma unáni-
me están en desacuerdo a la pregunta planteada, pues
opinan que las calificaciones obtenidas en evaluaciones
y trabajos no reflejan el conocimiento adquirido, pues
las plataformas digitales utilizadas no tenían un límite
de tiempo, ni control durante la evaluación, la mayoría
de las respuestas se obtenían de forma deshonesta.
De igual manera, los trabajos realizados no res-
pondían a una demanda de conocimiento, sino a la
necesidad de los estudiantes de cumplir con los están-
dares propuestos por la Institución.
En este sentido, los alumnos no están preparados
para dejar la tutoría constante de docentes y autori-
dades para iniciar un proceso autodidáctico, como un
recurso demandante en la situación actual; además, la
modalidad de educación virtual está generalmente di-
rigida a un público con formación académica de tercer
o cuarto nivel, con un grado de madurez psicológica y
emocional más estable, donde existe autoexigencia e
interés por culminar el proceso académico.
Con respecto a la pregunta sobre si las actividades
académicas realizadas durante este periodo fueron sig-
nificativas para su aprendizaje los resultados se mues-
tran en la Figura 3.
62 Juventud y Ciencia Solidaria.
Figura 3.
¿Las actividades académicas realizadas durante
este periodo fueron significativas para su aprendizaje?
Fuente: Elaboración propia
Según la figura 3, la mayoría de los participantes
están en desacuerdo, opinan que existieron docentes
que centraron el trabajo académico con fines relevantes
y significativos; mientras que otros direccionaron las
actividades prácticas a trabajos mecánicos, sin obje-
tivos específicos, sino únicamente para llenar insumos
con calificaciones o sustituir la labor docente, con
una carga mayor que en la modalidad presencial y
generando estrés y ansiedad.
Figura 4.
¿El personal docente se adaptó a los reque-
rimientos tecnológicos de los estudiantes o utilizaron las
herramientas tecnológicas de acuerdo a las demandas de
los estudiantes?
Fuente: Elaboración propia.
Es importante destacar que la educación no pre-
sencial puede influir en el desarrollo cognitivista y cons-
tructivista en los estudiantes al afrontar un nuevo mo-
delo de educación [1], cuestión utópica en las condi-
ciones actuales, donde los alumnos no pueden atender
a las demandas de este nuevo proceso de educación;
que aunque ha cambiado de medio mantiene los mis-
mos mecanismos de enseñanza, reemplazando a las
pizarras por computadores.
Es así que los alumnos están intentando mantener
el mismo sistema educativo, sin asimilar que las condi-
ciones son diferentes.
Ante la pregunta si el personal docente se adaptó
a los requerimientos tecnológicos de los estudiantes o
utilizaron las herramientas tecnológicas de acuerdo con
las demandas de los estudiantes se presenta la Figura
4.
Como lo muestra la Figura 4, la mayoría de los par-
ticipantes están en desacuerdo, consideran que pocos
docentes incursionaron en diferentes plataformas
virtuales y ofrecieron mecanismos de interacción a los
estudiantes, mientras que gran parte de los docentes
mantenía las mismas técnicas presenciales a través de
una plataforma virtual.
El cambio de modalidad en la educación es suma-
mente difícil considerando que las clases presenciales
son un sistema que se ha mantenido durante siglos, y
que su aporte es enriquecedor debido al contacto social
y físico, lo que no sucede en la formación a distan-
cia [2], pero ante las demandas actuales es necesario
adaptarse, sin perder la esencia social de la educación.
Los docentes en su mayoría carecen de capacitación
para adaptar sus métodos de enseñanza a herramien-
tas que la tecnología ofrece, debido a la premura en la
selección de plataformas digitales y por consecuencia,
la falta de dominio en el acceso y la navegación.
Se mantienen las mismas técnicas a través de una
cámara de manera sincrónica sin explorar las posibili-
dades para mejorar la interacción con los estudiantes;
reemplazando el trabajo práctico y la guía, por un cú-
mulo de tareas que no siempre representan aprendizaje
significativo.
Con respecto a la pregunta si considera que la falta
de interacción social con docentes, autoridades y estu-
diantes influyó en su aprendizaje se muestran los datos
en la Figura 5.
En el camino de la investigación 63
Figura 5.
¿Considera que la falta de interacción social con
do centes, autoridades y estudiantes influyó en su apren-
dizaje?
Fuente: Elaboración propia.
Según la Figura 5, la mayoría de los participantes
están totalmente de acuerdo con este cuestionamiento,
porque en la modalidad presencial era más sencillo
solventar sus dudas, cuestionar cuando los métodos
de enseñanza no eran los más aptos. Además, las he-
rramientas utilizadas por los docentes eran más com-
prensibles en el aula de clase. Del mismo modo, reiteran
la necesidad de intercambiar opiniones para fortalecer
el aprendizaje, y la falta de sus compañeros influye
en el estado de ánimo y concentración. También se
menciona la deficiencia en la conexión de Internet de
forma ocasional como una gran limitante. Una persona
del grupo opina que no ha sufrido mayor afección, ya
que el aprendizaje es una decisión individual.
Este proceso educativo diferente por el confi-
namiento ha llevado a los estudiantes, a estados de
estrés, depresión y ansiedad y a desarrollar sentimien-
tos de melancolía y ansiedad principalmente por los
problemas de conectividad.
Finalmente, se realizó la pregunta sobre cuáles
serían las recomendaciones para mejorar el aprendizaje
de los estudiantes, de continuar con las clases virtuales.
Sus recomendaciones fueron buscar mayor diversi-
dad de herramientas virtuales para llamar la atención
de los alumnos, fomentar la interacción entre docentes
y estudiantes, generar conversatorios para el desarro-
llo del aprendizaje conjunto, regular la cantidad de
tareas enviadas, y que se mejore la calidad de las
clases mediante tutorías personalizadas para atender
las necesidades de los alumnos. Es sumamente difícil
asumir el reto de una nueva forma de educación cuando
las directrices pedagógicas siguen siendo las mismas:
lecciones y clases magistrales, ejercicios y problemas,
tareas complementarias; que tenían un método especí-
fico de desarrollo en clases presenciales, y solo migraron
a los computadores imposibilitando su comprensión y
análisis fructíferos. “Pero asistir a una educación vir-
tual no solo supone superar las barreras del contacto
físico: es un cambio de paradigma radical al que hay
que acostumbrarse” [4]; por ello es pertinente buscar
nuevos mecanismos y atraer a los alumnos a una forma
de educación no tradicional, que permita descubrir las
ventajas de la modalidad virtual.
Conclusiones
Se puede entender que el aprendizaje sufrió una in-
terrupción que difícilmente se puede enmendar con
la enseñanza virtual, de ello se han derivado conse-
cuencias significativas para los estudiantes del último
año de Bachillerato que impidieron lograr un desenlace
exitoso en su vida académica.
Las instituciones educativas deberán evaluar este
proceso y tomar los correctivos pertinentes. Aprovechar
esta coyuntura para reformar el sistema educativo na-
cional, en el que puedan coexistir las clases presenciales
y virtuales de manera sincrónica y asincrónica, como
una opción para el fortalecimiento de los aprendizajes y
la vinculación con la tecnología tanto para estudiantes
como docentes.
Encarar los cambios en la estructura educativa que
representa un reto para los Gobiernos, docentes y es-
tudiantes. Los cambios son difíciles en sus inicios y
consecuentemente afecta a las primeras generaciones
que los enfrentan, por ello es necesario fomentar el
pensamiento crítico y la libertad creativa. Considerar
las condiciones individuales de cada estudiante, tanto
en el ámbito familiar, emocional y tecnológico como
factores que influyen en el proceso de aprendizaje.
Referencias
[1] Falcón, M, «La educación a distancia y su relación
con las nuevas tecnologías de la información y
las comunicaciones,» 2013. [En línea]. Disponible
en https://bit.ly/3f2tGag.
[2] Martínez, V, «La cuestión universitaria: Educación
presencial versus educación a distancia,» 2017. [En
64 Juventud y Ciencia Solidaria.
línea]. Disponible en https://bit.ly/3f76QhG.
[3] Erazo, O, «Ansiedad y estrés ante la reali-
zación de la actividad académica. Un problema
en cuarentena,» 2020. [En línea]. Disponible en
https://bit.ly/331Y3LC.
[4] Mendiola, J, «¿¿Realmente son eficaces las
clases virtuales?» 2020. [En línea]. Disponible en
https://bit.ly/3f98XBM. [Último acceso: 14
junio 2020].