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Taller 2: Causas y Detección del TDAH

Neurobiología del TDAH: factores causales.

Neurobiología del TDAH:

La disfunción cerebral del TDAH, se encuentra en un área especifica del cerebro: el córtex prefrontal que es la principal región cerebral responsable de las funciones ejecutivas y las estructuras subcorticales (ganglios basales), que son los encargados del control de impulsos e inhibición de respuestas automáticas.

Los neurotransmisores principales en estas áreas son la dopamina y la noradrenalina.

*Las hipótesis neurobiológicas explican el origen del trastorno; esto se debe a diversos factores causales del TDAH, como el estrés perinatal y el bajo peso al nacer, el hecho de que la madre sea fumadora durante el embarazo, la hipoxia, entre otros.

Por lo tanto los factores principales son: 

FACTORES GENÉTICOS:

Los estudios familiares indican que existen alta prevalencia de sufrir el trastorno entre los miembros de una misma familia.

La probabilidad de presentar TDAH cuando los sufren los padres es entre 2 y 8 veces mas (40% de los hijos). Si lo parece el hermano, el riesgo aumenta entre 3 y 5 veces mas (presente en el 25% de los hermanos) y un gemelo homocigoto el riesgo aumenta entre 12 y 16 veces más.

La HEREDABILIDAD de TDAH definida como la proporción de la enfermedad, corresponde a causas genéticas de un aproximadamente el 77% (Quintero, 2009).

FACTORES NEUROQUIMICOS:

Las alteraciones cognitivas y conductuales observadas en el TDAH son causadas por una disfunción en la neurotransmisión en áreas del córtex prefrontal.

Los neurotransmisores como la dopamina, noradrenalina y adrenalina, están implicados en los mecanismos de atención, motivación y planificación y ejecución de la acción o funciones ejecutivas.

La alteración de las vías dopaminérgicas esta en relación principalmente con los síntomas de hiperactividad e impulsividad.

FACTORES NEUROBIOLÓGICOS:

Las nuevas tecnologías de neuroimagen no invasivas permiten analizar a personas sanas o a sujetos que presentan alguna lesión cerebral, sin ningún riesgo, permitiendo identificar la estructura cerebral, funciones cerebrales, conectividad cerebral y detectar anomalías en el desarrollo del cerebro.

Mediante estas tecnologías enfocadas en neuroimagen, se han evidenciado que en niños con TDAH presentan afectadas las siguientes áreas: córtex prefrontal, ganglios basales, cuerpo calloso y cerebro. Las afecciones de estas áreas pueden ser de diversa índole, volumen reducido, patrones de activación anómala de los circuitos neuronales o anomalías neuroquímicas.

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NEUROIMAGEN CEREBRAL:

La mayoría de los estudios demuestran que existe una disminución del volumen cerebral total, especialmente en el hemisferio derecho, entre un 3 a 5% en los pacientes con TDAH respecto a la población control sin TDAH (Cortese, 2012).

En 2011 demuestran una disminución del volumen de sustancia gris en los ganglios basales, córtex temporal, occipital y cerebelo como nuevas áreas.

Estos mismos autores han hallado, que en los pacientes con buena evolución algunas zonas cerebrales, especialmente en el cuerpo calloso y área parietal, o bien normalizadas su grosor o incluso lo incrementan por encima de lo normal al llegar a la adolescencia como un intento de compensar las funciones alteradas.

FACTORES DE RIESGO AMBIENTAL:

Los más estudiados son los perinatales como la exposición al tabaco, alcohol o fármacos, la prematuridad, bajo peso al nacer, entre otras. Los factores ambientales por si solos no han demostrados que puedan producir TDAH, sin embargo, los factores ambientales y genéticos interactúan entre sí, lo cual cambia el riesgo de padecer el trastorno, de manera que es más probable la aparición del TDAH en niños con vulnerabilidad genética y que además han sido expuestos a algún factor ambiental.

RETROALIMENTACIÓN: 

VIDEO EDUCATIVO:

¿Qué pasa en el cerebro de alguien con TDAH?: