Caminar en la investigación se convirtió en una realidad latente que no está enmarcada en un claustro universitario ni en sus paredes. La investigación trascendió y así lo han demostrado las ediciones anteriores y sus autores. Jóvenes que demuestran una hambre de “hambre de conocimiento” y los motiva a innovar con lo que conocen hasta el momento. El saber hacer está puesto sobre la mesa con características únicas e irrepetibles que solamente una mente soñadora lo puede plasmar en realidad. 

Los invito a leer estas realidades que nacieron de un proyecto de colegio, y que en cada letra demuestra pasión por lo que hacen y como lo hacen.

La Fundación Salesiana PACES está latente con José, Martín, Erick y Ángel y su sueño de ser Ingenieros Automotrices. Entre el fútbol, la música y los autos, proponen un diagnóstico del sistema de alimentación de combustible.

La juventud femenina está presente con varios proyectos de la Unidad Educativa Particular Santa Mariana de Jesús. Karen, Maria Emilia, Doménica y Nadia motivadas por su pasión en el área de la salud, nos cuentan sus experiencias en el desarrollo de una estrella de colores para estímulo visual. Daniela, Angélica, Doménica y Madelaine relatan la construcción de un vúmetro. Paulina, Leslie, Daniela y Dayana nos comparten su aprendizaje en el desarrollo de un tubo de colores para estimulación. El éxito logrado en el funcionamiento de un puente iluminado para reacciones en el ojo, es contado con orgullo por parte de Maritza, Tatiana, Doménica y Allison. El desarrollo de un dado de colores empleando Bluetooth es experimentado por Erika, Roxanna, Maria Fernanda y Melanie. Todos estos proyectos son llevados a cabo desde el semillero de investigación de la Catedra UNESCO, compartiendo espacios, vivencias y vida universitaria desde un sueño común, aprender y apoyar desde la experiencia de otros. La frase de Google Scholar“A hombros de gigantes” se materializa en estos espacios.

La pasión por el ajedrez de Leonel, Joan y Bryan de la Unidad Educativa Particular Misioneros Oblatos, invita a ejercitar la mente y apostar por el establecimiento de buenas prácticas deportivas en la juventud. Grace, Érica y Karen apuestan por compartirnos su aprendizaje en alimentación saludable. Es en el juego y la experiencia como Carlos, Sandro y Edisson proponen la adaptación de un triciclo para personas con movilidad reducida. Adrián, Daniel, José y Christian del Colegio Técnico Salesiano nos comparten su análisis de efectividad de los aditivos en combustible y la verdad encontrada sobre su aporte a la disminución de contaminantes al medio ambiente. Leer estas publicaciones, sin duda es un deleite esperanzador. ¿Qué le espera a nuestra juventud? Solo podemos imaginarnos cosas buenas, que hace viva la frase de Don Bosco “La educación es cuestión de corazón”.